Abel (20)

Abel y J.Santana son la misma persona y responden a estilos afines. Seguramente el cambio de nombre fue impuesto por la abrupta ruptura de contrato de Abel con Ariola y su posterior fichaje por el sello barcelonés Belter. Santana, su verdadero apellido, fue un cantante melódico catalán con una de las mejores voces de toda la década de los 70, lo cual es mucho decir, ya que esa fue precisamente la década de los grandes cantantes solistas masculinos españoles. Tras su paso por Drums y Ariola, vivió en 1972 su particular travesía del desierto de vinilo negro para recalar en Belter, que relanzó su carrera con «Chiquita María / Tanto Amor» (Belter, 1973), que no rompió en éxito, pero que logro a medias su objetivo de poner de nuevo en circulación al cantante. Pronto edita un segundo sencillo, «Marilyn / Llueven Rosas» (Belter, 1974), con menor difusión radiofónica. Aquel 1973 un desconocido cantautor llamado Emilio José barrió en el Festival de Benidorm con «Soledad«. Se buscaba dar continuidad en la siguiente edición a aquel triunfo y Belter pensó en Abel, encargando a Emilio José una canción para él. La idea prometía. Se trataba de reunir al ganador absoluto de la edición anterior con un cantante que cuatro años antes, cuando era totalmente desconocido y con una canción mediana, había logrado meterse en la final del más exigente festival español. «Carolina» (Belter, 1974) no logra esta vez pasar de semifinales y la decepción es mayúscula, pues el sello había apostado, y fuerte, en este envite. Nuestro cantante se vio perjudicado por tener que cantar en la eliminatoria bajo un aguacero torrencial; aguacero que, por cierto, se inició mientras Toni Artis cantaba «Al salir el sol«. «Carolina» es editada en un sencillo cuya cara B es una muy curiosa versión española del tema de The Rubettes, «Sugar baby love«. Un disco variado y entretenido que tampoco acierta en la diana y propicia el final de la carrera de J.Santana. Aproximadamente en 1976 el cantante marcha a Galicia, donde prestará su excelente voz a alguna orquesta de baile de aquella región. Grabará un disco con el grupo gallego Los Player’s en 1980. A partir de ahí su huella se pierde un tanto, apareciendo esporádicamente como director artístico o productor en algunas grabaciones.